Un estilo autoritario parece estar barriendo el mundo. Con talante, eso sí, con fachada, pero autoritario. Quizá haya ocurrido siempre.
En Estados Unidos, hace unos días, hubo un revuelo periodístico cuando un responsable de la Casa Blanca invitó, por medio de la página web oficial, a que los ciudadanos que tuvieran conocimiento de críticas, a través de las redes sociales de Internet y correos electrónicos, sobre el poco más o menos que frustrado plan de salud pública, el conocido como “ObamaCare”, que hicieran llegar estos mensajes críticos a un departamento establecido para el caso. Algunos comentarios de prensa y blogs de Internet elevaron sus protestas comparando a la administración Obama con las prácticas político-policiales de vigilancia y denuncia de vecinos disidentes en la Cuba de Castro.
Por otro lado, las interpretaciones de prensa más benévolas quisieron ver en esta iniciativa oficial un modo de identificar los aspectos más criticables del proyecto para así poder revisarlos. Sin embargo, el Sr. Obama, en una posterior aparición en apoyo del candidato a gobernador de Virginia, realizó las siguientes declaraciones: “Yo, espero que se me haga responsable…… pero no quiero que aquellos que generaron el desastre hablen más de la cuenta. Quiero que se aparten del camino para que podamos limpiar la suciedad. No me importa limpiar lo que ellos han ensuciado, pero no que hablen más de la cuenta”
Fue ante estas declaraciones cuando la sensibilidad democrática de la prensa americana no ha podido seguir con su interpretación “buenista”. El mismo comentarista, James Taranto, del prestigioso e influyente Wall Street Journal, que había condescendido con benévola tolerancia a la iniciativa de la Casa Blanca, rectificaba hoy sobre este asunto, de la siguiente forma: “Nosotros estamos modificando nuestro punto de vista……” “La administración del Sr. Obama, quizá a causa de su desesperación, está adoptando un estilo retórico crecientemente autoritario” …… Continua el Sr. Taranto, “Es perfectamente aceptable, aunque no viniendo de un presidente, que Obama disienta de los republicanos y de la administración anterior. Pero decir que “no hablen más de la cuenta” va más allá de lo permitido. Esto es América, y ellos tienen el derecho constitucional de hablar todo lo que quieran. Decir que “se aparten del camino” también resulta problemático. Los republicanos, cuyo mandato concluyó después de las últimas elecciones están fuera del camino, habiendo dejado el gobierno para dar paso a Obama. A sus hombres y a sus aliados en el Congreso. ¿Qué puede posiblemente querer decir aquí el presidente sino que los republicanos de la oposición dejen de participar en política --- otra vez, algo que, en América, ellos tienen un perfecto derecho a hacer?” – Hasta aquí el comentario de James Taranto, editor de la página online del WSJ, que también deploró las referencias de violencia física de algunos políticos.
Obama, como buen socialista, en el sentido más político del término, parece tener tendencia a hablar de tolerancia para después consagrarse a regular y prohibir a diestro y siniestro. Igual que nuestros socialistas de a este lado del charco.
Por mi parte, no puedo dejar de sentir una sana envidia hacia esa pronta sensibilidad del “Esto es América, y ellos tienen el derecho constitucional de hablar todo lo que quieran.” ……… “esto es América” y aquí todo el mundo tiene derecho a participar en política, que tiene la prensa y la sociedad americana en comparación con la nuestra. ¿Cómo sonaría?.... "Esto es España y aquí……., esto es España y aquí……"
Por eso estas líneas, para proclamar esa rebeldía contra los “cordones sanitarios”, los nacionalismos excluyentes”, las interferencias entre poderes del estado, la mentira política, y demás enfermedades de nuestra mal llamada democracia.
Un estilo autoritario parece estar barriendo el mundo. Con talante, eso sí, con fachada, pero autoritario. Quizá haya ocurrido siempre. De cualquier modo, habrá que seguir enfrentándose con exigencia de democracia y “flexibilidad cero” para con los talantes ilegítimamente autoritarios de nuestra clase política.
En Honduras, las instituciones han funcionado para evitar que lo ilegítimo fuera legal.
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2 comentarios:
Muy buen articulo Juan Luis. Estoy totalmente de acuerdo y lamento que por estos lares no tengamos gente que defiende los derechos de palabra. El amigo Obama se esta pareciendo a uno que conocemos de aqui que vino con el TALANTE.
Completamente de acuerdo. Saludos.
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