sábado, 28 de diciembre de 2013

El “okupa” Arturo y su “casero”


Refiriéndose a España en una entrevista al periódico italiano “La Repubblica”, Arturo Mas declara: “Él es un padre que ama a su hijo, al que obliga a una relación de subordinación más allá del tiempo permitido. Vivimos en una condición de inquilinos de un propietario hostil. (È un padre che non ama suo figlio, quello che lo costringe a un rapporto di subordinazione oltre il tempo lecito. Noi viviamo in una condizione di inquilini di un proprietario ostile.”
Ahí le asaltó a Artur Mas, nacido Arturo Mas, el subconsciente de su inconsciencia, verdadera máquina de la verdad, que espontáneamente le hace manifestarse y sentirse como “inquilino”, no como propietario, de un casero llamado España al que niega el pago del alquiler. Con la caradura de todo buen “okupa”, todavía le reclama el alquiler que le correspondería a él pagar como “inquilino”.
Lo que, hoy por hoy, salva a Arturo Mas es que, escarmentado por la ineptitud y trapacería del anterior, el propietario ha nombrado un nuevo administrador que le ha salido “manso solemne”. Un administrador que, el mundo al revés, no solo le paga al inquilino los importes de los alquileres que de este debería cobrar, importes que van a sufragar las deudas de juego del desaprensivo inquilino, sino un administrador que, en sus "ruedas de plasma" con la prensa, declara preocuparle más el valor futuro de la vivienda que el cobro de los alquileres actuales o la existencia de un “okupa” respondón y desahogado que tiene comportamientos violentos y descarados con el propietario.
No hace falta que lo diga el "casero", lo dice el propio Mas, lo dice el subconsciente de la inconsciencia de aquel que, espontáneamente, otorga a España su condición de “casero” y, por tanto, se arroga para si mismo la de inquilino “okupa” ….. Arturo, paga el alquiler o vete a Suiza con los tuyos. Descarado !!!