martes, 9 de febrero de 2010

Controladores Aéreos y Políticos Eólicos

.

Es a todas luces exigible a la clase política española que todo político quede equiparado a cualquier ciudadano de a pie en lo que se refiere al número de percepciones que pueda obtener del Erario Público, en vez de disfrutar del privilegio de percibir dos, tres o más salarios de la Administración.

Es a todas luces exigible a la clase política española que todo político quede equiparado a cualquier ciudadano en lo que se refiere al IRPF, en vez de estar exentos del impuesto en un tercio del sueldo, como parece ocurrir con los diputados o senadores, porque se considera como indemnización por gastos de su cargo.

Es a todas luces exigible a la clase política española que todo político quede equiparado a cualquier ciudadano en cuanto a la cotización en el número de años para cobrar la totalidad de la base reguladora de la pensión, en vez de disfrutar los intolerables privilegios de los miembros del Gobierno a quienes basta con jurar el cargo y acumular siete años de ejercicio para poder obtener la pensión máxima de jubilación.

La agencia de noticias Europa Press publicaba el pasado día 6 de este mes unas declaraciones de José Blanco, Ministro de Fomento, posterior al Consejo de Ministros de ese día, en los siguientes términos. Extracto algunos párrafos de la noticia de Europa Press:

El Ministro de Fomento, José Blanco, destacó este viernes que "no es tolerable" que una empresa pública como Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) pague sueldos millonarios a sus empleados "mientras el Gobierno pide austeridad al resto de los españoles"………

La intervención estatal era por tanto necesaria, porque está comprometido "el interés público" y es obligación del Estado de derecho el garantizar la eficiencia del servicio de control aéreo……..

También explicó que el Decreto pone fin al "privilegio incomprensible" que contempla el actual convenio de los controladores de dejar de trabajar a los 52 años sin dejar de cobrar…….


Parafraseando al eximio Ministro de Fomento me pregunto, y le pregunto al Ministro:

¿Es tolerable que la Administración Pública pague sueldos millonarios a sus ministros, diputados, secretarios de Estado, etc “mientras el Gobierno pide austeridad al resto de los españoles”?

¿No será por tanto necesaria la intervención estatal por estar comprometido “el interés público” y ser obligación del Estado de derecho el garantizar la eficiencia de los parlamentarios, como servidores públicos, a su país?

¿No será necesario que el Ministro también explique por qué no se pone fin al “privilegio incomprensible” que contempla la situación actual por la que los parlamentarios dejan de trabajar seis meses al año sin dejar de cobrar?

Frente a los Controladores Aéreos, el Ministro Blanco ha actuado con celeridad y decisión, publicando un Real Decreto para eliminar privilegios inmerecidos de los controladores.

¿Sería mucho exigir similar presteza para corregir el intolerable privilegio que los parlamentarios disfrutan en sus sueldos y jubilaciones?.... No, no sería mucho exigir.

¿Sería mucho esperar similar presteza para corregir el intolerable privilegio que los parlamentarios disfrutan en sus sueldos y jubilaciones?.... Sí, sí sería mucho esperar de este Gobierno sectario, y de una casta política mayoritariamente pancista sin vocación de servicio público.

Según el eólico Zapatero, la Tierra pertenece al viento, pero los sueldos millonarios parece que no son ecológicos, sino que los administran los políticos “a su aire”.



3 comentarios:

María dijo...

Olvida este señor como siempre lo más importante. Los controladores cobran tanto porque en sus manos se encuentran las vidas de miles de personas. A mayor responsabilidad, mayor sueldo. Lo demás es demagogia. Habrá que esperar a un accidente grave para que vuelvan las cosas a su lugar.

Anónimo dijo...

Visto lo visto, tras la devastadora campaña mediática vertida en contra del colectivo de controladores aéreos, chivos expiatorios de una sociedad que los condena ya a priori, con fundamento o sin él, no importa, por el mero hecho de conocer sus supuestas retribuciones, cabría preguntarse por ejemplo ¿cuáles serán los privilegios y los sueldos de estos periodistas, que de tertulia en tertulia, de radio o televisión, en muchas ocasiones sin información suficiente, haciendo afirmaciones sin fundamento, creando opinión uy sentando cátedra en la sociedad tan solo por tener la oportunidad de poder salir a la palestra? Se me ocurre una diferencia entre esos periodistas y los controladores, ellos pueden hacer su trabajo bien o mal, faltar a la verdad o no, pero los otros han de cuidarse muy mucho de equivocarse pues sus malas acciones si tienen dramáticas consecuencias.

Anónimo dijo...

Otra flecha del comentarista que da en la diana; pero esto es predicar en el desierto, ninguno de nuestros ilustres parlamentarios se va a inmolar por promover este punto, más bien tratará de archivarlo en la papelera. En vez de punto final se trata mas bien de un punto y seguido.